En esta nueva entrega, viene una carta al Director firmada por M.N., y publicada el Sábado 16 de diciembre de 1.865, en el Periódico El Lloyd Español, de Barcelona.

  En la presentación de la carta ya apunta el Sr. Director un comentario jocoso de lo que ha tardado en llegar la misma a Barcelona desde Mahón, insinuando  si algo tiene que ver la famosa y absurda cuarentena que se les obligaba a purgar, a todos los buqes de la línea regular entre Barcelona y Mahón, durante el verano de 1.865, viajes que podían resultar interminables …………  Veamos pues la carta:


  Mahón a 28 de noviembre de 1.865

  Sr. Director del Lloyd Español.

  Este comercio suplica al Lloyd llame la atención del Gobierno sobre la incalificable conducta del Sr. Sub-Gobernador D. Agustín Sevilla, que en su ridículo pruito de no hacer nunca bien alguno sino se le manda de real orden y terminantemente, continua sujetando a rigurosa cuarentena y expurgo de cinco días las procedencias de Barcelona, y en particular los vapores correos la sufren con todo el rigor de la defectuosa ley sanitaria, aplicada con la amabilidad que su jefe inspira a los empleados del lazareto.

  Por Dios, pidan ustedes al Gobierno de S. M. que mande creer a D. Agustín Sevilla, que no hay cólera en esa, y que no cantaron el Te Deum de contrabando, sino autorizados de Real Orden, porque si  absorbiendo la política toda la atención del Sr. Ministro de la Gobernación, como es natural en tiempo de elecciones, no le ocurre la pequeñez de enviar una Real Orden a su amigo, que para complacer a S. E. nosotros mantenemos, no dude V. que seguirá firme en su natural elemento de fastidiar, no quitando en todo el año la cuarentena, que sacrifica al comercio, perjudica a los pasajeros y arruina a la empresa de esos vapores, perturbándolo todo.

  De nada sirve el ejemplo de que en ningún punto de España, incluso en la vecina isla de Mallorca, se admitan sin observación las procedencias de Barcelona; hay mas admitido el vapor a libre plática en Alcudia, punto de escala en su travesía, y de donde solo se ha hecho y hacen aun tres días de observación en esta, ¿no irrita verle castigar a su llegada, en las aguas de la inquisitorial mansión lazaretiana a cinco días de cuarentena?

  Si el señor Sevilla consultara siquiera a los respetables señores de la junta de Sanidad, y no menospreciara su autorizada opinión, tal vez no se cometerían tantas arbitrariedades, aunque a no dudarlo, las cuarentenas, cuando deban ser, se harían con mas verdaderas condiciones de tales, y sin apariencias de castigo impuesto a los que tienen la desgracia de deberse sujetar a ellas.

  ¿Sabe V. desde cuando no ha reunido el M. Iltre. Sr. Sub-Gobernador de Menorca a la Junta Provincial de Sanidad de Mahón?  Desde el 30 de Agosto último, para acordar la sujeción a cuarentenas, a las procedencias de puntos de que solo confidencialmente se sabia la existencia de casos de cólera.

  Pues,  ¿por qué no la consulta ahora para proponer la disposición contraria, que el estado de salud de esa capital y el decoro y dignidad de sus autoridades exige, no menos que la conveniencia del país, que tiene la desgracia de ser así gobernado?

  Pero nada tiene de extraño deje de reunir la Junta por esa “friolera”, el Presidente que no lo ha hecho en tanto tiempo, en circunstancias como las que hemos atravesado, y en que Menorca misma ha sufrido la amargura de tener invadidos con numerosos casos de cólera a dos poblaciones: Ciudadela y Mercadal, que gracias a Dios están ya libres del terrible azote.

  ¡Parece imposible!   Nada oficialmente ha sabido la Junta de Sanidad, nada le comunica su Presidente, subordinándolo todo a su voluntad omnímoda, sujeta por desgracia a tendencias tan poco paternales.

  Sin tiempo para mas, espero amigo mío, procurara V. levante El Lloyd su autorizada voz contra la odiosa cuarentena, a que con tanta inconveniencia se sujetan esas procedencias por el Sub-Gobernador de Menorca, y se repite su constante amigo y S.S.

M.N.